“LA LARGA”.

En la isla, un pequeño barrio, aparece una mujer altísima que mide más o menos unos dos metros, dicen que aparece a altas horas de la noche y en otros casos en la madrugada.

Viste una manta café que la cubre completamente, desde la punta de sus pies hasta su cabeza, ocultando su rostro en un pequeño espacio que lo hace ver oscuro y nadie lo ha podido ver, dicen que su manta es tan larga que en ocasiones parece que estuviera flotando en ves de ser tan alta como comentan. Por este aspecto, los habitantes de este barrio la llaman la larga.

Una vez don Alberto, estaba en su casa viendo televisión como a eso de las dos de la madrugada. Atrás de su casa había un villar clandestino, supuestamente un villar, porque quedaba en una casa y solo tenia ocho o diez clientes, que por cierto todos eran amigos y todas las noches incluyendo los días de semana se reunían a jugar, a beber, escuchar música y hablar en voz muy alta, lo cual perturbaba a todos los vecinos.

Esa noche, don Alberto se dirigió a hablar con los jóvenes y pedirles que bajaran un poco el ruido porque no dejaban dormir a los vecinos, los jóvenes reaccionaron bien y eso fue lo que hicieron. La paz reino en ese momento, pero cuando don Alberto se dirigía hacia su casa, en la esquina vio una persona altísima con el mismo aspecto de esa mujer que ya habían visto varias personas, “la larga”, el no lo creía.

En ese momento se quedo parado y la reparo, cuando siguió caminando no sintió ningún temor, pero cuando llego a su casa pensó que esa mujer era demasiado alta para ser normal, además, sumando su aspecto y su forma de vestir. En ese mismo instante se asomo a su ventana y ella aun continuaba allí, parada en la esquina observándolo definidamente, sintió un escalofrió que le hizo estremecer todo el cuerpo, cerro la ventana e inmediatamente se dirijo a dormir.

Y así pasaron los días… Algunas personas dicen que la han visto en distintos lugares, principalmente en esquinas, no es muy común que la veas, pero cuando la ves, piensas primero en lo rara que es y después cuando te das cuenta o la vuelves a ver y te esta mirando, el miedo te domina y los nervios se alteran de tal forma que no la querrás verla jamás.